En muchas culturas del mundo existe la tradición de celebrar a la mujer embarazada en una fiesta especial donde las mujeres de su comunidad se reúnen para aconsejar y guiar a la mamá primeriza. En estas ocasiones se comparte la alegría del bebé que viene en camino y toda la esperanza que una nueva vida alberga. Pero, sobre todo, son espacios donde se transmiten los saberes de las mamás más experimentadas: las alegrías y los retos de la crianza.

Abuelas, tías, primas, comadres y amigas queridas tienen oportunidad de tejer esta red de soporte que toda mamá necesita a lo largo de su vida, particularmente en los meses siguientes del postparto, cuando todo es nuevo y asombroso –incluso a veces, al mismo tiempo, aterrador–.

Algunas de las dudas más frecuentes que rondan la mente de las mujeres que se estrenan en la maternidad son «¿Seré una buena mamá?» y «¿Lo estaré haciendo bien?». La realidad es que cada una hace lo mejor que puede, con las herramientas que tiene y desde su propia experiencia de vida. Existen muchos estilos de «ser mamá» y poco a poco irás encontrando el tuyo.

Uno de los mejores consejos es: ¡Confía en tu interior! A veces tanta información, en ocasiones contradictoria, hace difícil tomar decisiones sobre cosas sencillas como cada cuándo darle de comer a tu bebé, dónde dormirlo, qué marca de biberones usar, etc. Intenta escuchar tu voz interior y si hay algo que no sabes o con lo que necesitas ayuda: ¡No dudes en pedirla! Habrá momentos donde quizá el desvelo, el altero de ropa sucia y las manchas de leche en tu suéter te harán sentir que «eres la única que no sabe bien cómo hacerlo», pero la verdad es que esas inquietudes son compartidas por muchísimas mujeres alrededor de ti.

Si tienes oportunidad de hablar con mamás con las que te identifiques en su forma de ser o estilo de maternidad, que admires o a quienes quieras emular, pregúntales todo lo que se te ocurra; ellas ya tienen más camino recorrido y estarán encantadas de pasarte valiosa información. También puedes platicar con profesionales de la salud como tu Médico Materno Fetal y recibir sus atinados consejos. Hoy en día tenemos la suerte de que existen recursos hechos por profesionales tales como libros, asesorías individuales, talleres virtuales, etc., con los que puedes apoyarte.

El Baby Shower es una celebración anglosajona, adoptada de nuestros vecinos los Estados Unidos de Norteamérica, que se ha extendido en varios lugares de México en la que pueden participar hombres y mujeres. Usualmente se hace hincapié en los regalos para el bebé, los buenos deseos para los futuros padres y los juegos que divierten a la mamá festejada y sus invitados.

O quizás hayas escuchado del Blessingway (también conocido como Mother’s Blessing), que es una celebración donde se honra el pasaje de la mujer a la maternidad; es decir, «su camino» y por lo tanto se enfoca en la mamá embarazada y no en el bebé, como lo suele hacer el Baby Shower. Tiene su origen en un ritual Navajo concebido como un evento espiritual que incluye canciones, cantos, bendiciones y ritos de sanación. Los navajos pertenecen a los pueblos originarios de Estados Unidos y es una de las tribus nativo-americanas más conocidas.

Hoy en día el Blessingway se ha adaptado a una celebración alternativa u holística a la cual solo asisten mujeres cercanas a la mujer que está esperando bebé (estas puedes ser mamás o no) y donde se realizan actividades como crear mandalas con elementos naturales, tejer coronas de flores, aplicar masajes curativos, encender velas y declarar oraciones que invoquen salud, armonía, paz y buena fortuna para el camino de la maternidad.

Sea como sea que elijas celebrar tu embarazo, si es apropiado, te recomendamos usar este momento para abrir la conversación y recibir esas piezas de información, tips prácticos y consejos de oro que pueden hacer de los inicios de tu maternidad una experiencia más calma y feliz. Verás, no faltará quien te cuente alguna experiencia de terror de su parto o una visión pesimista de la maternidad… Pero, como dirían los ingleses: “Take it with a pinch of salt”, que se traduce algo así como “Tómalo de quien viene y no te lo tomes tan en serio”.

Y para cerrar, como una nota curiosa, algunos nombres con los que se conoce al Baby Shower en otras partes del mundo son: «té de canastilla», «fiesta de pañales» y «fiesta de nacimiento».

En Profetal queremos acompañarte en este momento tan importante de tu vida. Haz una cita aquí.