Agosto se considera el mes dedicado a crear conciencia sobre la Lactancia Materna porque la Organización Mundial de la Salud celebra cada año la Semana Mundial de la Lactancia Materna del 1 al 7 de agosto. Este año el enfoque está en plantear soluciones para que las madres puedan continuar amamantando a sus bebés al reincorporarse al trabajo.
La lactancia materna es más que una simple forma de nutrición; es un acto de amor y cuidado que brinda innumerables beneficios tanto para la madre como para el recién nacido. Y en PROFETAL queremos honrar y resaltar la importancia de este vínculo especial entre mamá y bebé.
Beneficios de la lactancia materna para el bebé
- Nutrición óptima:
La leche materna es el alimento perfectamente adaptado para el bebé, proporcionándole todos los nutrientes esenciales que necesita para un desarrollo saludable. Además, contiene anticuerpos y otras sustancias que refuerzan el sistema inmunológico del bebé, protegiéndolo contra enfermedades y alergias.
- Fortalecimiento del vínculo:
La lactancia materna crea un fuerte vínculo emocional entre la madre y el bebé. El contacto piel con piel durante la alimentación ayuda a fortalecer el apego, proporcionando seguridad y tranquilidad al recién nacido.
- Desarrollo cognitivo:
Diversos estudios han demostrado que los bebés amamantados tienen un mayor desarrollo cognitivo y un coeficiente intelectual más alto en comparación con aquellos que no lo son. Los nutrientes presentes en la leche materna son cruciales para el desarrollo adecuado del cerebro y el sistema nervioso del bebé.
Beneficios de la lactancia materna para la mamá:
- Recuperación posparto:
La lactancia materna estimula la liberación de oxitocina, la «hormona del amor», que ayuda a que el útero se contraiga y vuelva a su tamaño normal más rápidamente después del parto. Además, amamantar puede contribuir a la pérdida de peso posparto.
- Reducción del riesgo de enfermedades:
Las mujeres que amamantan tienen un menor riesgo de desarrollar enfermedades como el cáncer de mama y de ovario, así como una menor incidencia de diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares a lo largo de su vida.
- Mejora del bienestar emocional:
Amamantar libera hormonas que promueven la sensación de bienestar y reducen el estrés y la ansiedad en la madre. Además, el contacto cercano con el bebé durante la lactancia puede aumentar los sentimientos de conexión y satisfacción.
Siete consejos que te ayudarán a establecer la lactancia materna
En este blog te compartimos siete consejos prácticos para ayudarte a establecer con éxito una lactancia materna feliz y saludable. ¡Recuerda también que cada proceso es único y es importante ser amable y compasiva contigo misma!
- Infórmate antes del parto:
El primer paso es adquirir conocimiento sobre el proceso. Lee libros, artículos y participa en clases de lactancia prenatal para familiarizarte con las técnicas adecuadas y resolver posibles dudas. Cuanto más informada estés, más confianza tendrás en tu capacidad para amamantar.
- Establece un ambiente propicio:
Crea un ambiente relajado y tranquilo. Encuentra un rincón agradable en tu hogar, con cojines y apoyo lumbar, donde puedas sentarte cómodamente mientras amamantas. Asegúrate de tener cerca todo lo que necesitas: agua, snacks saludables, un libro, música, pañuelos desechables, etc. Cuando salgas de casa, lleva contigo los artículos que para ti sean necesarios, como una manta o un babero, incluso tu cojín favorito. ¡Que no te importe lo que piense la gente! Y, si vas a regresar a trabajar, asegúrate de que tu empleador te dé espacios apropiados para amamantar o extraer leche en tu lugar de trabajo.
- Aprovecha el poder del contacto piel-con-piel:
El contacto piel-con-piel con tu bebé es mágico. Practícalo poco después del nacimiento y siempre que te sea posible. Esta experiencia estimula la producción de leche materna y fortalece el vínculo entre tú y tu pequeño.
- Aprende la técnica adecuada:
Buscar una posición cómoda y una técnica adecuada para amamantar es fundamental. Asegúrate de que el bebé tenga una boca bien abierta y tome el pecho con una amplia porción de la areola. Mantén el cuerpo del bebé cerca del tuyo para que no tenga que esforzarse y pueda succionar correctamente. Existen aditamentos que puedes emplear como pezoneras, ungüentos y sacaleches. La experiencia de una asesora profesional de lactancia materna puede mejorar significativamente tu proceso personal y ayudarte con los retos que estés enfrentando.
- Paciencia y persistencia:
La lactancia materna es un aprendizaje tanto para la madre como para el bebé. Puede tomar tiempo para que ambos se acostumbren a este proceso. Ten paciencia contigo misma y con tu bebé. No te desanimes por los desafíos iniciales; con tiempo y práctica, la lactancia materna se convertirá en una experiencia natural y gratificante.
- Busca el apoyo de familiares y amigos:
Recuerda que no estás sola en este viaje. Busca el soporte de familiares, amigos o grupos de apoyo de lactancia materna. Compartir tus experiencias y obtener consejos de otras mamás puede brindarte confianza y motivación adicional. Toma siempre los consejos de quien viene y aprende a poner límites a la gente que te hace comentarios hirientes.
- Cuida tu salud:
Para mantener una producción de leche saludable, es esencial cuidar tu propia salud. Descansa lo suficiente, mantén una dieta equilibrada y bebe mucha agua. Evita el estrés innecesario y recuerda que cuidarte a ti misma es igual de importante para tu bebé como la lactancia misma. Tal vez este punto es un reto pues es posible que estés cansada y no tengas mucho tiempo para cocinar. Para ello te recomendamos pedir ayuda a otras mujeres a quien les tengas confianza, contratar un servicio de alimentos preparados o cocinar un día de la semana y congelar. Los licuados o batidos pueden ser una forma rápida de preparar un desayuno. Y no olvides hablar con tu Médico Materno Fetal sobre la posibilidad de tomar vitaminas y suplementos.
En la Semana Mundial de la Lactancia Materna celebramos este hermoso acto de amor y cuidado que nutre tanto el cuerpo como el alma de nuestros bebés. Establecer una lactancia materna exitosa puede requerir tiempo y esfuerzo, pero los lazos que se crean y los beneficios para la salud de tu bebé lo hacen valer la pena.